Estación de autobuses y biblioteca en Ronda

Estación de autobuses y biblioteca en Ronda

FICHA TÉCNICA

Localización:      Ronda (Málaga), España

Año:                     2013

Tipo:                    Cultural/SIPS

Estado:                Propuesta de concurso

Presupuesto:     8,600.000€

Descripción: Un edificio que pueda establecer relaciones claras con la ciudad y su entorno, y que sea capaz de interpretar su contenido desde el exterior, capaz de identificarse a través de las cualidades propias de cada uso y entender las diferentes escalas urbanas, generar un diálogo visual con el cauce ferroviario inmediato, abrirse a la ciudad conformándose como un elemento del paisaje urbano. El edificio se posiciona de forma contundente pero diferenciando claramente los dos usos, a la vez que genera espacios de relación entre ellos, y punto de encuentro en la ciudad. Dos usos aparentemente antagónicos se unen de forma sencilla pero eficiente dando lugar a nuevas relaciones que complementan los dos usos, es decir, tomar un café en un descanso en el estudio, o leer un libro mientras se espera el autobús…

La disposición de los usos en el edificio se entiende desde los aspectos más propios de cada uso y de las incompatibilidades entre ellos. Las cualidades fundamentales que debe poseer un espacio destinado a biblioteca son luz para que permita la lectura y el estudio, y silencio, para que permita la concentración. Estas cualidades son, a priori, contrarias a las cualidades que podemos percibir en una estación de autobuses, como ruido, movimiento de pasajeros y vehículos, etc. La propuesta jerarquiza la situación de los usos desde sus extremos cualitativos hacia situaciones intermedias comunes, es decir, si consideramos  la situación de los usos a modo de bandas funcionales, la banda situada mas al sur, en contacto con el cauce ferroviario y la ciudad vieja, acoge los usos de la biblioteca que requieren de las cualidades específicas, luz y silencio, y la banda situada al norte es la que acoge aquellos usos de la estación de autobuses con mayor carga de ruido y movimiento de autobuses y usuarios. El volúmen de la estación de autobuses se abre hacia los andenes, pero se cierra de forma contundente hacia la biblioteca, permitiendo el desarrollo lógico de sus funciones. Entre estos volúmenes principales se genera un espacio intermedio, a modo de vestíbulo urbano, que acoge el control de acceso a la biblioteca y las circulaciones internas, de uso común, polifuncional, capaz de acoger diferentes situaciones, trabajo en grupo, espera, descanso y adscrito al patio entendido como prolongación exterior del vestíbulo.

La ubicación del edificio de la estación de autobuses es tal que forma una barrera acústica y formal entre el ambiente ajetreado de llegada y salida de viajeros y autobuses y el necesario mundo de silencio para el estudio. Así pues, el programa se organiza de manera lineal formando bandas, de modo que cada una de ellas sirve a la siguiente: la zona comercial sirve a la zona de espera, ésta da paso a la zona de circulación y ésta última a la zona de andenes. La apertura del edificio hacia los andenes facilita que desde cualquier punto de la estación se pueda controlar las llegadas y salidas, el turno en la compra de billetes y la zona de cafetería, todo ello al mismo tiempo. La entrada y salida de vehículos se resuelve mediante una sola entrada y una gran zona de maniobras en la que se han estudiado los recorridos de cada posible vehículo, permitiendo la circulación incluso con todos los andenes ocupados.
La propuesta en su conjunto ha sido concebida desde los criterios de sostenibilidad teniendo en cuenta el tamaño y orientación de huecos, ventilaciones, elementos de protección solar, circulación y ventilación, climatización. Con un solo gesto (la división en dos volúmenes unificados por una cubierta) se atiende a la separación programática, dando lugar a dos edificios independientes pero complementarios.

Arquitectura bioclimática: El aprovechamiento de las condiciones ambientales del lugar, el sol, la ventilación, la vegetación y el agua pueden generar condiciones de bienestar en el interior de los edificios sin el empleo de instalaciones convencionales lo que contribuye a un ahorro energético y a una disminución de las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Para este objetivo, la arquitectura bioclimática estudia las condiciones climáticas del lugar, establece las condiciones de confort hidrotérmico del usuario ( en función del arropamiento y la actividad metabólica a desarrollar) y estudia las estrategias pasivas necesarias para la obtención del bienestar.

ESTRATEGIAS BIOCLIMATICAS PASIVAS DE VERANO. DÍA
1. Protecciones solares mediante lamas horizonatales a sur , dimensionadas para evitar la radiación solar
2. Cubierta ajardinada como elemento de cubrición con gran estabilidad térmica. evita ganancias en verano y pérdidas energéticas en invierno debido al efecto regulador térmico de la vegetación.
4. Ajardinamiento con elementos vegetales de diferente porte, generación de sombras y evitan el sobrecalentamiento del patio. Generación de microclima.

5. Muro de hormigón e= 30 cms. orientado a sur de gran inercia térmica que permite en verano el amortiguamiento térmico mediante el retardamiento de la onda térmica al interior de la estación de autobuses
6. Sistema de refrigeración pasivo a partir del movimiento del aire generado por el microclima
7. Marquesina de protección solar para la estación de autobuses. Generación de sombras y evita el sobrecalentamiento de la zona de andenes y espera exterior.

ESTRATEGIAS BIOCLIMATICAS PASIVAS DE VERANO. NOCHE
Basicamente la estrategia utilizada es la generación de una ventilación continua que permita el enfriamiento de los materiales de masa térmica colocados al interior y el propio ambiente, de forma que por la mañana se cierran las compuertas y contraventanas manteniendose el ambiente fresco durante las primeras horas del día. Cuando el ambiente empieza a calentarse, la energía almacenada en los materiales comienza a cederse al espacio interior, con lo que se retardaría aun más la puesta en marcha de los sistemas de refrigeración, tanto pasivos como activos.
8 Losa de hormigón de gran inercia térmica en contacto con el terreno. Debido a la gran estabilidad termica del terreno, mediante la losa de hormigón se permitiría ese intercambio de energía que estabilizará la temperatura del suelo, al menos 6º menos que el exterior. Se condidera que la temperatura del suelo permanece constante entre 1.50 y 20 mt. de profundidad. Un forjado en contacto con el terreno presenta dos zonas de trasmisión térmica, la zona periferica, con ganancia y pérdidas según las condiciones exteriores, efecto de borde y la central soportando un intercambio relativamente constante con el suelo. En invierno captará energía con temperatura superior a la exterior y en verano será un sumidero de energía que refrigerará estos mismos espacios.